El parto o nacimiento lotus (lotus birth) consiste en no cortar el cordón umbilical y dejar al recién nacido pegado a la placenta hasta que esta se desprenda por si sola de manera natural, de esta manera no habrá riesgos de sangrados, dolor e infecciones.
El nombre “lotus” proviene del apellido de la persona que descubrió este método, Clair Lotus Day. Esta mujer comenzó a dudar y a cuestionar el corte umbilical que se practica de rutina en todos los partos. Las inquietudes de la mujer la condujeron hacia un ginecólogo obstetra que acepto practicar esta técnica cuando naciera su bebé.
Los países que más practican el nacimiento lotus es en Estados Unidos, Canadá y Australia. El bebé permanecerá unido a la placenta por alrededor de 7 a 10 días, hasta que el cordón umbilical se seca y se desprenda de forma natural por el ombligo, exactamente como un cordón umbilical que se haya cortado al nacer.
Después de algunas horas del nacimiento, la placenta se lava con agua templada y se deja escurrir en algún tipo de envase con agujeros, después se seca con cuidado y se coloca en una canasta con un paño absorbente, un envase decorado, o una bolsa especial para esto.
Hay personas que le echan sal para acelerar el proceso de secado, algunas personas la decoran con pétalos de flores aromáticas y otros objetos para que no se vea desagradable a la vista de muchos.
Aunque no se habla mucho del nacimiento lotus, desde el año 1974 han nacido muchos bebés de esta forma, nacimiento en casa, en hospitales, en el agua e incluso cuando a la mujer le hacen una cesárea. Muchas personas lo ven como una hermosa manera de “honrar la placenta”, la primera fuente de alimento de nuestro bebé en el vientre.
La OMS (Organización Mundial de Salud) aconseja cortar el cordón umbilical 3 o 4 minutos después del nacimiento, o hasta que este deje de latir, Esto es porque según un estudio que se realizó, esta técnica reduce los riesgos de Hipoxia (falta de oxigeno en el cerebro del bebé), así como de anemia y hipoglucemia.