Desde el primer día que nos enteramos que vamos a ser mamá empezamos a prepararnos, comenzamos a investigar en internet cada cosa y con el nacimiento del bebé no sentimos perdidas, a veces triste, sola y con mil dudas en la cabeza.
Con el nacimiento del bebé se supone que debemos sentir una felicidad enorme, ya no hay náuseas, no hay vómitos, y por fin tenemos en nuestros brazos a ese pequeñito que esperamos durante esos largos 9 meses… Y de momento te preguntas! ¿Pero porqué me siento así?
Pues te tengo una respuesta: En el postparto, al igual que en el embarazo; todas experimentamos cosas diferentes, algunas mujeres en su embarazo no tienen ningún síntoma, mientras que otras lo tienen todos.
Igualmente en el postparto, algunas mujeres no tienen ningún problema para su recuperación, en cambio otras viven momentos muy difíciles. Muchas experimentan tristeza postparto, que la gran mayoría de mujeres lo experimentan.
Esos primeros días con el bebé podemos llorar por frustración, por no saber porque llora el bebé, por no poder calmar su llanto, porque la leche no baja de nuestros senos o porque ya el bebé nos tiene el pecho agrietado y apenas llevamos amamantándolo un día. Estamos que lloramos por cualquier cosa, nos sentimos muy cansadas.
Muchas mujeres no hablan por temor a ser juzgadas y prefieren vivir la tristeza en silencio. Prefieren suprimir el dolor y las lágrimas, pero te digo algo: No estás sola. Muchas nos sentimos así, y es algo pasajero y pronto pasará.
Tener que afrontar un parto ya sea vaginal o por cesárea e inmediatamente hacernos cargo de nuestro bebé es un esfuerzo físico, emocional y mental. Es normal que a veces usted sienta que no va a poder más con la responsabilidad.
Reconocer nuestras limitaciones, aceptar que estamos cansadas, que el cuidado del bebé o no poder calmar su llanto nos agobia y nos angustia por la inexperiencia. Cuando te sientas así; busca ayuda, pedir ayuda no nos hace más débil, todo lo contrario, demuestra que somos humanas y sensatas.
Algunas mamitas nos comparten las cosas más difíciles de los primeros días como mamá.
* Para mi definitivamente fue tener que despertarme cada dos horas o menos para alimentar a mi bebé. La falta de sueño y el cansancio en esos primeros días son muy duros.
* Amamantar a mi bebé: yo lloraba junto con él; porque aunque muchas digan que la lactancia es fácil, pues no todas vivimos las misma experiencia.
* Para mi lo más difícil fue el llanto de mi bebé. Mi bebé lloraba por todo, me sentía frustrada, cansada, no podía hacer nada, ni siquiera comer tranquila. Pero después que cumplió su primer añito y aprendió a caminar, esos malos momentos ya son historias.
Y tú… ¿Cómo te ha ido o cómo te fue? Nos encantaría que también nos compartas tus experiencias.