Los pezones planos o invertidos no deberían ser un problema para amamantar porque los bebés no maman del pezón sino del pecho (Deben agarrar pezón y gran parte de la areola).
Casi todos los pezones invertidos están rodeados de tejido suficientemente protráctil como para que el pezón protruya con la estimulación o la succión, y después de unos cuantos días de lactancia se mantengan hacia afuera incluso entre toma y toma.
La mayoría de mujeres con pezones invertidos no tienen problemas y pueden dar pecho porque el pezón queda moldeado en la boca del bebé durante la succión.
Muchas mujeres renucían a la lactancia materna pues creen que no podrán amamantar a su bebé, pero con constancia y algunos consejos a poner en práctica podrás alimentarle sin problema.
Pezones planos o invertidos: Al apretar la areola entre los dedos índice y pulgar el pezón normal sobresale. Cuando el pezón no sobresale de la areola se dice que es plano, pero cuando éste parece retraerse aún más hacia atrás como si fuese un ombligo se dice que está invertido.
Los pezones planos e invertidos tienen ligamentos más cortos que los normales haciendo que en lugar de proyectarse hacia afuera se vean hundidos.
Esto dificulta que el bebé se agarre bien al pecho, haciendo que al inicio de la lactancia pueda ser un poco problemático pero no impide la lactancia materna.
No la impide porque como dijimos un poco antes en este artículo, el bebé no necesita un pezón para mamar. Allí están los agujeritos que permiten la salida de la leche, pero va a salir sea como sea si el bebé “succiona” el pecho agarrando y abarcando gran parte de la areola con su boca.
Los pezones planos suelen corregirse con la propia succión que realiza el bebé para alimentarse mientras que los pezones realmente invertidos nunca protruyen, es decir, nunca salen hacia afuera.
Con pezones planos o invertidos usted podrá darle pecho a su bebé, pero en ocasiones la lactancia materna puede resultar dolorosa ya que cuando el bebé succiona puede crear heridas en la piel de los pezones formando grietas.
Los pezones planos o invertidos no son en sí un impedimento para la lactancia materna aunque pueden llegar a serlo si se añaden otros factores de dificultad como:
Inicio tardío de la lactancia (después de las 2 primeras horas después del parto). Los bebés a la hora de vida tienen todos los instintos a flor de piel, buscan el pecho y son capaces de mamar por si solos, incluso de un pezón plano o invertido.
Pasadas dos horas entran en un periodo de alertagia y duermen durante muchas horas. Intentar iniciar la lactancia materna en ese periodo y sobre todo después de haber recibido chupete o biberón no suele salir bien.
Lo primero que tiene en la boca un bebé crea impronta, es importante que haga impronta con el pecho, y si uno de los pezones es más plano o invertido que el otro es mejor empezar con ese.
Ofrecer biberones de leche de fórmula, sueros o chupetes. Por que no se parecen en nada un chupete o tetina a un pezón plano o invertido.
Uso de pezoneras, su uso retrasa el aprendizaje del bebé a mamar correctamente e impide el moldeamiento del pezón.
Consejos para amamantar sin problemas
- Confía en tu capacidad para alimentar a tu bebé. Tus pechos son válidos!
- Busca información durante tu embarazo acudiendo al grupo de apoyo de lactancia materna más cercano.
- Consigue un inicio precoz de la lactancia, y trata de ofrecer el pecho a tu bebé en sus dos primeras horas de vida.
- Pide apoyo de asistencia profesional y apoyo durante las primeras tomas después del parto.
Importante: No crear interferencias ofreciendo tetinas, chupetes o pezoneras, esto le crearía confusión al bebé y retrasaría el momento en el que mamaría bien por primera vez.
En la mayoría de los casos no es necesario usar pezoneras, solo si no consigues que agarre el pecho de ninguna manera pueden ser una solución temporal.