El cuidado de un recién nacido es tan importante, y las personas han creado una serie de mitos que pueden confundir principalmente a los nuevos padres.
1- Llorar ensancha los pulmones de tu bebé:
Falso. Nunca se ha demostrado que dejar llorar a un bebé tenga efecto en ensanchar sus pulmones. Si un bebé llora lo hace por que le ocurre algo; como sueño, hambre, tiene el pañal sucio o algún cólico. Si dejamos al pequeño llorar, el bebé no comprenderá por que nadie va a ver que le ocurre. El bebé siempre debe saber que las personas a su alrededor están ahí para él, y que lo aman y lo protegen.
2- Cortarle el cabello seguido lo hace más fuerte:
Falso. Si después de usted cortarle el cabello a su bebé esté parece más fuerte, es por que ahora le faltan las puntas finas, las que le daban un aspecto más frágil. Los recién nacidos pierden casi todo el cabello o todo con el que nacen, cambiándolo por el cabello que tendrán realmente. Así que no tiene ningún sentido cortarle el cabello antes de los seis meses.
3- Si estornudan es por que están resfriados:
Depende. Los bebés no pueden sonarse la nariz, por eso se liberan de las secreciones que acumulan en sus vías respiratorias a través de estornudos. Los bebés también estornudan cuando están resfriado, pero en caso como estos también presentan otros síntomas, como calentura o malestar.
4- El azúcar le quita el hipo:
Falso. La mayoría de los bebés tienen hipo por la inmadurez de su Sistema neurológico. No es aconsejable probar los mismo consejos que se le dan a los adultos. Mejor déle el pecho, o deje al bebé tranquilo; el hipo desaparecerá solo.
5- No debes cortarle las uñas en sus primeros meses de vida:
Falso: Al momento de nacer las uñas de las manos del bebé pueden estar muy largas y muchos bebés se aruñan la cara. Para cortarlas debes usar tijeras de bebés con puntas redondas, o un corta uñas de bebé. Aprovecha un momento en el que el bebé esté tranquilo o preferiblemente durmiendo.
6- Si agregas cereal a su último biberón, dormirá más tiempo:
Depende. Agregar cereal también puede tener efectos contrarios provocando que el bebé se despierte aún más seguido. Sabemos que no es fácil trasnocharse, y a veces los padres estamos muy cansados por que llevamos muchas noches sin poder dormir bien; por lo que a veces agarramos el primer consejo que nos prometa un poco de descanso. Por eso este es uno de los mitos más difícil de erradicar.
7- Los recién nacidos saben nadar por instinto:
Falso. Este mito es muy peligroso. Es verdad que los pequeños dejan de respirar cuando los sumergen en el agua. Pero por que esto suceda no quiere decir que no se puedan ahogar. Si un bebé no se saca rápidamente del agua, se ahoga por que sus pulmones se quedan bloqueados.
8- Mientras más temprano le salgan los dientes, más inteligentes serán:
Falso: Los dientes de leche salen cuando deben hacerlo; en algunos niños los dientes pueden salir días después de nacer, mientras que en otros pueden salir hasta casi un año después del nacimiento. La inteligencia que su bebé obtenga cuando sea mayor dependerá de los genes que haya heredado de sus familiares, y de los estímulos que le ofrezcan las personas que siempre lo rodean. La inteligencia no tiene nada que ver con la salida de los dientes.
9- Los bebés no pueden ver cuando nacen:
Falso. Claro que los bebés pueden ver. Los recién nacidos pueden ver mejor a una distancia entre 15 y 30 centímetros. A medida que van pasando los días, su visión se va ampliando. En los primeros meses de vida, el bebé prefiere los colores con un contraste fuerte y de tonos contundentes.
10- No debes sacar a tu bebé hasta que tenga 15 días de nacido:
Falso: Puede que la gente haya inventado este mito por que quieren evitar que el bebé coja alguna enfermedad. Naturalmente no debes acercar a tu bebé a una persona con una enfermedad contagiosa; pero esto no tiene nada que ver con el aire libre. Si puedes salir con tu bebé, solo debes usar el sentido común. Por ejemplo en el verano evita sacar a tu bebé en las horas más caliente, y en el invierno por igual; evita salir cuando este muy frío o ventoso.